martes, 22 de diciembre de 2009

DIARIO DE SUEÑOS (19)



en mi sueño
busco trabajo
por toda la ciudad

entro en una tienda
y pido trabajo

entro en un bar
y pido trabajo

entro en un banco
y pido trabajo

nadie me lo da

entro en mi casa
y pido trabajo

mi máquina de escribir
salta sobre mi pecho

“yo te daré trabajo”,
me dice

dudo, me lo pienso,
y finalmente
comprendo:
lo mío es escribir,
aunque lo haga mal,
aunque no me dé dinero,
aunque me vaya la vida en ello...

“vamos a la mesa”,
le digo cariñosamente
a la máquina de escribir

11 comentarios:

Marcos Callau dijo...

Encantador para un escritor es leer este relato. Escribir en máquina "de escribir" tiene un encanto que el frío teclado de un ordenador desconoce. Una delicia de sueño.

roberto dijo...

Ah, una máquina de escribir... El ordenador está bien, Dana, pero la magia que hay escondida entre esas teclas...

Miss Ana dijo...

Fuuu... cómo se nota que no habéis tenido que copiar documentos por triplicado y con calco, no veríais la máquina de escribir con los mismos ojos.

roberto dijo...

Vale, vale, visto así...

J.E. Alamo dijo...

Yo la máquina la veo con buenos ojos, pero con mi natural torpeza para las acitivades manuales, mejor uso el ordenador.
Por cierto: FELIZ NAVIDAD

roberto dijo...

Lo cierto es que el ordenador está muy bien pensado, pero soy un nostálgico sin remedio.
Feliz Navidad, Joe.

irene dijo...

Una gran amiga esa máquina, me enternece sólo imaginaros uno frente a la otra.
Muchos besos y mis mejores deseos para ti, tu familia y amigos

roberto dijo...

Eso es, Irene, grandes amigos, la máquina y el creador.
Muchos besos, y mis mejores deseos para estos días tan así...

José Miguel Vilar-Bou dijo...

Los sueños son difíciles de alcanzar, pero cómo se disfruta del camino. Saber que vas hacia algo. Que tu esfuerzo le da forma a algo nuevo en el mundo. Que tu trabajo no es pura mecánica para que este mundo de engranajes que hemos montado siga girando. Mola.

roberto dijo...

Tener sueños es hermoso, José Miguel, y abrir caminos nuevos con ellos.

Anónimo dijo...
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