11:30 y 15:15 horas (dos sesiones)
Charla con los autores DANIEL TEJERO y ROBERTO MALO sobre sus obras literarias ilustradas destinadas al público infantil
Universidad de Teruel
Facultad Ciencias Sociales y Humanas
Salón de Actos Amparo Sánchez
Teruel
¡Nos vemos!
https://www.holamonstruo.com/producto/la-bruja-anacleta/
"¡Eco, eco!", cuentos ecológicos, con Daniel Tejero y Roberto Malo
Laspuña
(Huesca)
https://www.holamonstruo.com/producto/la-bruja-anacleta/
El libro de la vida: Un hombre
abre el libro de su vida por la primera página y lee su nacimiento. Como es
curioso, pasa rápidamente todas las páginas, hasta llegar al final, y lee su
muerte. Disgustado, el hombre cierra el libro de golpe y muere aplastado.
Posos: Con manos trémulas, me bebí a
pequeños sorbos el té de mezcal. El brujo tomó ceremoniosamente la taza y leyó
en los posos mi destino. Como ya me temía, me informó de que tenía el gran mal,
y de que en menos de un año moriría. Estoico por fuera, destrozado por dentro,
encajé su vaticinio y le pagué religiosamente lo pactado. Después decidí pedir
otro té. Dadas las circunstancias, necesitaba una segunda opinión.
Una miradita al futuro: Un hombre dudaba entre
casarse o no con su novia, con la que llevaba ya seis primaveras. Para hacerse
una idea le pidió a un adivino que le mostrase en su bola de cristal cómo
estaría ella al cabo de dos años. La bola reveló una imagen de su novia con al
menos treinta kilos de más. Ante semejante visión, el hombre decidió abandonar
a su esbelta novia, y ésta, desesperada, sintiéndose morir, empezó a comer y
comer como una loca.
La
astuta hermanastra: A las doce en punto de la noche, Cenicienta pierde un
zapato mientras sale a la carrera del baile real. Esto lo observa una de sus
hermanastras; como se conoce el cuento, se calza en un segundo el zapato de
Cenicienta y deja en su lugar uno suyo. Cojeando ligeramente, la hermanastra se
aleja del baile con una amplia sonrisa.
La distancia
no engaña: Las caras de los dos niños estaban aplastadas contra una de las
ventanillas del avión. “Mira, qué pequeña se ve la ciudad”, decía uno de los
niños mientras la sobrevolaban. “Sí, desde aquí las personas parecen
hormiguitas”, asintió el otro. Al mismo tiempo, las hormigas gigantes que se
habían apoderado de la ciudad miraban expectantes el gran avión de pasajeros
que surcaba el cielo azul.
"Cuentos de otoño", mi columna semanal en El Periódico de Aragón de hoy jueves 26 de septiembre.
Pongo el enlace a continuación:
"¡Eco, eco!", cuentos ecológicos, con Daniel Tejero y Roberto Malo
Broto
(Huesca)
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Gistain
(Huesca)
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"¡Eco, eco!", cuentos ecológicos, con Daniel Tejero y Roberto Malo
Mediana de Aragón
(Zaragoza)
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"¡Eco, eco!", cuentos ecológicos, con Daniel Tejero y Roberto Malo
Fiscal
(Huesca)
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A veces en los sueños tengo trabajos que no realizo en
la vida real. Supongo que será algo habitual. Todos fantaseamos con ser
cantantes famosos, artistas de éxito, bailarines profesionales… El otro día
tuve un sueño muy curioso. En él había quedado con Daniel Tejero, escritor con
el que represento cuentacuentos de nuestros libros en común. “Me han llamado de
un colegio para ir el sábado que viene”, le informo. “¿Para un cuentacuentos?”,
pregunta animado. “No”, resoplo, “Para hacer de motivadores y entrenadores”.
“¡Otra vez!”, suspira él, “Ahora un montón de colegios nos llaman para lo
mismo. ¿Y de qué deporte se trata esta vez? ¿Fútbol? ¿Baloncesto?”.
“Balonmano”, respondo. “Ah, pues te encargas tú de la estrategia, eh, que
controlas más el tema”, me dice, ya que yo jugué de joven a balonmano.
“Descuida”, asiento, “Y son muy buenos los chavales. Menos mal. He visto vídeos
y leído informes y creo que les haremos ganar”. “Me da igual si ganan o no”,
replica Dani, sincerándose, “Lo importante es que se lo pasen bien. Motivarles
para que disfruten la experiencia”. “No, tío”, disiento, “Yo quiero que ganen.
Si ganan ya sabes que nos llaman más”. “Eso sí”, reconoce mi compañero,
meditabundo, “¿Tú crees que si les gustamos nos llamarán también como
cuentacuentos?”. “Bueno, lo importante es que nos llamen, hagamos lo que
hagamos. Los caminos de la animación son infinitos”, reflexiono, “Ahora les
hemos caído en gracia como motivadores. Y hay que aprovechar el tirón. Seguro
que volverán a llamarnos como cuentacuentos”. “A ver si es verdad”, bufa Dani
con resignación. Tras una épica charla y un partido reñido pero de final
victorioso me despierto finalmente, eufórico. Ya en el mundo real, quedo con
Daniel para un cuentacuentos, le cuento el extraño sueño y nos echamos unas
buenas risas. Sin embargo, la idea central del sueño no deja de darme vueltas.
¿No nos habremos equivocado de profesión?
"Los motivadores", mi columna semanal en El Periódico de Aragón de hoy jueves 19 de septiembre.
Este fin de semana por fin pude sacar algo de tiempo para disfrutar de esta maravilla con mi hija. Muchísimas gracias a Roberto Malo y a Daniel Tejero Hernando por trasladarme hasta mi más tierna infancia, donde devoraba los libros de "Elige tu propia aventura" a los que tanto me ha recordado esta casa de las pesadillas.
https://apachelibros.com/young/167-la-casa-de-las-pesadillas.html
