El escritor y periodista Juan Bolea reseña mi último libro de relatos en El Periódico de Aragón. Para leer la reseña completa puedes pinchar en el siguiente enlace:
Y para el que no quiera pinchar (que de todo tiene que haber) la pongo a continuación:
"LA LUZ DEL DIABLO"
Roberto Malo reúne una colección de relatos sumamente originales e ingeniosos.
Roberto Malo reúne una colección de relatos sumamente originales e ingeniosos.
Dueño de una inquieta personalidad, Roberto Malo viene combinando en los últimos tiempos las facetas de narrador -cada vez más sólido- y animador cultural (domina las artes de la escena, algo infrecuente en los escritores).
Como autor, ha publicado dos libros de ficción, Maldita novela y La marea del despertar, además del libro de relatos Malos sueños. Su trabajo literario más reciente se titula La luz del diablo (Mira Editores) y aglutina una interesante y variada colección de relatos.
El que da título al volumen, La luz del diablo, es una inquietante versión del tema clásico de la posesión diabólica y de la transmutación de los cuerpos. Tiene su dosis de terror, como cuadra al asunto elegido, pero asimismo comulga de la más blanca religión del cuento fantástico, pues en la confusión de identidades, de espejos, hay una escena extraordinaria en la que la comunicación entre el plano real y el sobrenatural se materializa a través de un espejo de pared. Con la muerte siempre como sombrío fondo, la culpabilidad y el arrepentimiento como humanos purgatorios y el deseo de transgresión, conocimiento, dominio e inmortalidad como secreta aspiración de un alma ambiciosa, el cuento emanará una luz, amén de diabólica, literaria.
Menos sofisticado, pero más emotivo, especialmente en su delicado desenlace, es el relato que abre la serie, y que se titula El fin de la felicidad. Asistiremos en sus páginas al descubrimiento de un amor universitario, con visos de prender y asentarse hacia la madurez, y a su rápida pérdida. La muerte de la novia llegará a obsesionar al protagonista a tal punto que creerá sentir su presencia hasta en el propio aire que le rodea. A fin de despejar cualquier duda, viajará hasta Roma, lugar donde se produjo el accidente, para emprender una penosa investigación.
En La revelación, Malo, con muy pocos elementos, un pequeño apartamento, un vecino de vacaciones que siempre llama a la puerta cuando menos se le espera, consigue algunos efectos dramáticos realmente espeluznantes. Este cuento, narrado, como todos los demás, con una prosa muy depurada, de una pasmosa sencillez, limpia y clara, pero rica en equívocos y dobles sentidos, daría pie a una historia mucho más larga, incluso a una especie de American Psycho a la española, pero Malo acierta a reducirla a su esencia para regalarnos un cuento ejemplar en sus veladuras y causas, revelador y desasosegante en sus tremendas, pero también esclarecedoras, escenas finales.
Los favores se pagan tiene un falso aire de cuento infantil de fábula, hasta que, de pronto, el lector comprende que todas esas apariciones y magias que parecen entretener al protagonista durante la primera parte del relato iban por completo en serio.
Esa mezcla de seriedad y humor, de derrotismo y lógica encuentra una ilustrativa continuidad en El cuento mutilado, una entretenida sátira del mundillo de los premios literarios, cruzada con la alevosía de un psicópata empeñado en mutilar los escritos de un joven narrador.
Un ramillete, en definitiva, de originales narraciones que hablan en favor del talento del autor, de su afición al misterio, a la intriga, a lo esotérico y a lo fantástico.
Como autor, ha publicado dos libros de ficción, Maldita novela y La marea del despertar, además del libro de relatos Malos sueños. Su trabajo literario más reciente se titula La luz del diablo (Mira Editores) y aglutina una interesante y variada colección de relatos.
El que da título al volumen, La luz del diablo, es una inquietante versión del tema clásico de la posesión diabólica y de la transmutación de los cuerpos. Tiene su dosis de terror, como cuadra al asunto elegido, pero asimismo comulga de la más blanca religión del cuento fantástico, pues en la confusión de identidades, de espejos, hay una escena extraordinaria en la que la comunicación entre el plano real y el sobrenatural se materializa a través de un espejo de pared. Con la muerte siempre como sombrío fondo, la culpabilidad y el arrepentimiento como humanos purgatorios y el deseo de transgresión, conocimiento, dominio e inmortalidad como secreta aspiración de un alma ambiciosa, el cuento emanará una luz, amén de diabólica, literaria.
Menos sofisticado, pero más emotivo, especialmente en su delicado desenlace, es el relato que abre la serie, y que se titula El fin de la felicidad. Asistiremos en sus páginas al descubrimiento de un amor universitario, con visos de prender y asentarse hacia la madurez, y a su rápida pérdida. La muerte de la novia llegará a obsesionar al protagonista a tal punto que creerá sentir su presencia hasta en el propio aire que le rodea. A fin de despejar cualquier duda, viajará hasta Roma, lugar donde se produjo el accidente, para emprender una penosa investigación.
En La revelación, Malo, con muy pocos elementos, un pequeño apartamento, un vecino de vacaciones que siempre llama a la puerta cuando menos se le espera, consigue algunos efectos dramáticos realmente espeluznantes. Este cuento, narrado, como todos los demás, con una prosa muy depurada, de una pasmosa sencillez, limpia y clara, pero rica en equívocos y dobles sentidos, daría pie a una historia mucho más larga, incluso a una especie de American Psycho a la española, pero Malo acierta a reducirla a su esencia para regalarnos un cuento ejemplar en sus veladuras y causas, revelador y desasosegante en sus tremendas, pero también esclarecedoras, escenas finales.
Los favores se pagan tiene un falso aire de cuento infantil de fábula, hasta que, de pronto, el lector comprende que todas esas apariciones y magias que parecen entretener al protagonista durante la primera parte del relato iban por completo en serio.
Esa mezcla de seriedad y humor, de derrotismo y lógica encuentra una ilustrativa continuidad en El cuento mutilado, una entretenida sátira del mundillo de los premios literarios, cruzada con la alevosía de un psicópata empeñado en mutilar los escritos de un joven narrador.
Un ramillete, en definitiva, de originales narraciones que hablan en favor del talento del autor, de su afición al misterio, a la intriga, a lo esotérico y a lo fantástico.
JUAN BOLEA
Escritor y periodista
Escritor y periodista
2 comentarios:
Bienvenido a la blogosfera, querido Roberto. Que no decaiga y un fuerte abrazo.
Enhorabuena por este nuevo libro de relatos.
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