Cada Navidad, hago mi buena acción. Pongo alguno de los pobres del barrio en mi mesa. Y sinceramente, una vez cocinados, ya no huelen tan mal. Y más de uno resulta exquisito.
Hola Roberto. Ya estoy de vuelta pero "sin tildes" pues mi teclado tiene problemas. En fin.... la informatica y yo nos llevamos muy mal. Lei este texto mientras estaba en Madrid y recuerdo que lo hice en voz alta para beneficiar al resto. Nos hizo mucha gracia. Es estupendo. Me recordo a un capitulo de "Farmacia de guardia" en que invitaban a cenar a un mendigo de la calle, que resultaba ser Fernando Fernan Gomez. Tambien hicieron el mismo capitulo en "Cuentame" y el pobre resulto ser Jose Luis Lopez Vazaquez en uno de sus ultimos papeles. Esa historia del pobre en la mesa se presta mucho a la escritura pero ese final tuyo tan sorprendente tiene la inconfundible firma Malo. Un fuerte abrazo de vuelta en Zaragoza.
Genial. ¿Para cuando tus relatos hiperbreves o microrrelatos (o como quieras llamarlos) publicados?
ResponderEliminarSon muy buenos.
Je,je,je... Muy berlanguiano.
ResponderEliminarY de postre, ¿qué? ¿Brazo de gitano?
Felices fiestas.
Sin duda hay gente que hace eso, aunque sea en sentido metafórico.
ResponderEliminarHola, Manchas. Di que sí (que te oigan los editores).
ResponderEliminarYa saldrán, ya, paciencia.
Hola, Alfredo, berlanguiano, claro que sí. Felices fiestas.
ResponderEliminarHola, José Miguel. Es una metáfora, por supuesto. Tú sí que me comprendes...
ResponderEliminarVaya buen hombre... estás hecho...
ResponderEliminarHola, Vero, el apellido me pierde...
ResponderEliminarHola Roberto. Ya estoy de vuelta pero "sin tildes" pues mi teclado tiene problemas. En fin.... la informatica y yo nos llevamos muy mal. Lei este texto mientras estaba en Madrid y recuerdo que lo hice en voz alta para beneficiar al resto. Nos hizo mucha gracia. Es estupendo. Me recordo a un capitulo de "Farmacia de guardia" en que invitaban a cenar a un mendigo de la calle, que resultaba ser Fernando Fernan Gomez. Tambien hicieron el mismo capitulo en "Cuentame" y el pobre resulto ser Jose Luis Lopez Vazaquez en uno de sus ultimos papeles. Esa historia del pobre en la mesa se presta mucho a la escritura pero ese final tuyo tan sorprendente tiene la inconfundible firma Malo. Un fuerte abrazo de vuelta en Zaragoza.
ResponderEliminarFeliz vuelta, Marcos. Ya contarás.
ResponderEliminarUn abrazo.